"Ni siquiera sé quién es usted", dijo ella finalmente.
Pronunciaba cada palabra con un tono uniforme, con el mismo énfasis cada una,
pero diciendo más suavemente la última... Luego retomaba su rostro inmóvil,
su boca un poco mordida y sus ojos azules mirando fijo a lo lejos.
"Yo tampoco conozco su nombre", respondió Meaulnes.
Entre los múltiples cambios que están ocurriendo en Internet, uno muy importante, que ha pasado casi inapercibido en la prensa del área, es el cambio en la delegación de los dominios de primer nivel. Históricamente, el sistema de nombres en Internet se ha basado en la delegación de autoridad, lo que ha permitido mantener un espacio de millones de nombres distribuidos por todo el planeta en forma eficiente y al día. La tecnología de base del sistema (DNS: Domain Name Service) no sufrirá grandes cambios y se considera suficientemente robusta para continuar soportando el crecimiento futuro de la red.
Sin embargo, el área política se ha complicado demasiado para seguir operando con las mismas reglas simples e inocentes de un comienzo. La idea inicial fue que los nombres de dominio iban a corresponder a un esquema jerárquico organizacional y por lo tanto con reglas bastante simples. En un inicio se crearon los dominios de primer nivel en Estados Unidos, donde se seguía la idea de separar los tipos de organización en gobierno (.GOV), educación (.EDU), comercial (.COM) y militar (.MIL). Se dejó espacio para las organizaciones que no correspondían a ninguna de estas categorías en un dominio (.ORG) y para los organismos internacionales (.INT). Luego se creó también un dominio para los proveedores de conectividad (.NET). Aparte de estos dominios, se acordó que existiera un dominio de primer nivel para cada país del mundo, siguiendo el código de dos letras ISO 3166. Aparte de estos dominios de primer nivel, existe también el dominio raíz de todos, que tiende a llamarse el dominio "punto" (.), y es el que delega estos dominios de primer nivel a ciertos servidores de nombres y organizaciones.
Este esquema está aún en vigencia, y tanto el dominio raíz como todos los dominios que no son ISO 3166 son administrados por el InterNIC en Estados Unidos. Desde hace un par de años, el InterNIC comenzó a cobrar por mantener delegaciones bajo sus dominios (salvo a los dominios ISO 3166), lo que desató una enorme polémica en la red, ya que iba ligado a grandes problemas de funcionamiento del InterNIC, que básicamente ya no daba abasto con el crecimiento en su operación. Básicamente, el esquema inicial organizacional no estaba siendo respetado. La idea original era que cada organización iba a tener un sólo nombre de dominio de segundo nivel, eligiendo si iba bajo .COM, .NET, etc o bajo algún país ISO 3166. Luego iba a seguir su estructura interna de divisiones, departamentos, etc. para formar su esquema de sub-dominios. Por ejemplo, dcc.uchile.cl sigue esa idea: el Departamento de Ciencias de la Computación de la Universidad de Chile en Chile. En la práctica, las empresas no siguen esa línea, sino que prefieren posicionar productos, marcas o nombres de fantasía en sus nombres de dominio. Por ejemplo, las bebidas Fanta y Coca-cola son embotelladas en Chile por alguna empresa. Sin embargo, el nombre de dominio del servidor web de las bebidas será fanta.cl y coca-cola.cl, porque es el nombre del producto lo que la gente ubica.
Esto hace que la explosión por inscribir nombres de dominio es mucho más fuerte que el crecimiento de la red en número de organizaciones conectadas. Básicamente, se registra un dominio por cada marca, producto y organización en el planeta entero. Además, en los nombres de productos entran las marcas registradas y las propiedades, por lo cual es muy usual que un nombre importante a nivel mundial se inscriba en todos los dominios de primer nivel existentes, incluidos los ISO 3166.
En ese esquema, el monopolio de los dominios de primer nivel ha hecho crisis, y varios de los dominios se han abierto a organizaciones de cualquier lugar del mundo y sin limitaciones de ningún tipo (como .COM y .NET), denominándose dominios de primer nivel genéricos. Aún así, se requería una solución al problema del monopolio, para asegurar una buena calidad de servicio. Dos opciones se enfrentaban: liberar el espacio de los dominios de primer nivel, permitiendo nuevos dominios administrados por distintas organizaciones (se habían propuesto .WEB, .BIZ, .LTD, etc.) o bien permitir que múltiples organizaciones pudiesen compartir la administración de un mismo dominio (en particular .COM).
Se formó un comité ad-hoc para proponer una solución a este problema, y sus recomendaciones ya fueron publicadas, definiendo un calendario que debiera permitir partir operando en abril de 1997. La idea es crear unos pocos dominios más de primer nivel (unos siete), pero sobre todo abrir la administración de los dominios genéricos a múltiples organizaciones. El principal objetivo es que .COM tenga revendedores en todo el mundo, y que uno pueda cambiar de administrador sin tener que cambiar su dominio.
Esto debiera aliviar la presión por terminar con los monopolios de los dominios de primer nivel, sin poluir demasiado el espacio de nombres. El problema que no se va a resolver tan fácil es el de las marcas registradas y los nombres considerados propiedades de ciertas empresas. Al utilizar el nombre coca-cola por ejemplo, bajo cualquier dominio que sea, incluso como nombre de mi máquina personal, puedo estar violando la ley de marcas. Basta con interpretar que esto implica difundir ese nombre públicamente, lo que probablemente es cierto. Este problema, sin embargo, habrá que resolverlo en las cortes de justicia y no en los administradores de dominio, que deben limitarse a hacer bien su administración técnica.