¡Comercio Electrónico Ya!

José M. Piquer

¿Mi reloj se detuvo? No. Pero las agujas no precen girar. No mirarlas. Pensar en otra cosa: en este día detrás de mí, tranquilo y cotidiano, a pesar de la agitación de la espera.

La Mujer Rota -- Simone de Beauvoir

He visto circular mucha información sobre iniciativas para apoyar el desarrollo del comercio electrónico en Chile. Desde leyes, iniciativas gubernamentales hasta proyectos concursables para tecnología. Una creencia falsa detrás de estas iniciativas es que se requiere hacer cambios fundamentales en la legislación para poder hacer comercio electrónico. Por supuesto que para tener dinero digital, transacciones en línea y validaciones estrictas aun faltan varios pasos. Pero para poder vender y comprar a través de la red no se requiere nada más de lo que ya hay. Los libros de amazon se venden vía Internet, pero el back-office para procesar los pagos es enteramente convencional.

¿Porqué en Chile no hay muchas de esas iniciativas? Alguien me preguntó el otro día que le diera un sólo ejemplo exitoso de una tienda que vendiera vía Internet en Chile. Yo le respondí: NIC Chile, donde vendemos dominios vía Internet y recaudamos pagos vía Servipag. "Era que no", me respondieron. En todo caso, ando en busca de ejemplos así que envíenme un mail si tienen casos interesantes que mostrar.

Yo pienso que estamos justo en una ventana de oportunidad importante para el país. La situación tecnológica en comunicaciones es buena, la interconectividad entre proveedores, pudiendo mejorar mucho más, ya no es tan mala. Pero, lo más importante, el número de clientes potenciales ya es enorme. Como lo han mostrado iniciativas como la de Impuestos Internos, hay un número enorme de usuarios esperando usar Internet para sus transacciones y sólo requieren los incentivos y los servicios. El mito de la falta de usuarios conectados es duro de morir, pero la experiencia muestra que es falso.

Nuestra contabilidad de máquinas bajo .CL es de 60.000 máquinas con nombre de dominio, lo que debiera llevarnos a unas 200.000 personas con acceso a Internet, si no es más. La extrapolación nos lleva a que en un año más debiera duplicarse esa cifra. Por la baja tolerancia a los cambios de las generaciones más viejas, la masa de usuarios están bajo los 40 años, por lo que mi generación es la más vieja de la red. Sin embargo, ya hay gente con mucha plata en ese rango, esperando la oportunidad de comprar en la red.

Este es el momento de invertir en poner los productos en Internet, hay mercado local suficiente y, por supuesto, podemos comenzar a vender y comprar sin esperar a que los monopolios, los bancos ni el congreso se den cuenta de lo que está pasando. A nivel tecnológico, no requerimos más de lo que tenemos hoy. A nivel de país, lo que se requiere es la voluntad de los empresarios de hacerlo.

Si no lo hacemos ahora, es posible que perdamos para siempre el liderazgo que nos caracterizó a nivel regional en Internet.





José M. Piquer
Thu Jul 15 23:46:52 CLT 1999