AccessNova: un sueño por construir




José M. Piquer

Joven amigo: ¿Se siente revolucionario? ¿Cree que la hora se acerca para nuestros pueblos?

En ese caso, proceda CON SERIEDAD. La revolución no es un juego. Cese de reír. NO SUEÑE. Sobre todo NO SUEÑE. Soñar no conduce a nada, sólo la reflexión y la seriedad confieren la ponderación necesaria para las acciones duraderas. Niéguese al delirio, a los ideales, a lo imposible. Nadie baja de una sierra con diez machetes locos para acabar con un ejército bien armado. - Julio Cortázar: Último Round


He tenido varios sueños en mi vida, y estoy asombrado de los muchos que he cumplido. No siempre, pero a veces uno baja de la sierra con diez machetes locos y el ejército sale corriendo en desbande. Creo que esa posibilidad es la que hay que conservar siempre en nuestra pequeña esperanza viva, en nuestras mínimas oportunidades de hacer algo importante, de aportar. Atesorar esos exiguos triunfos que nos demuestran que la revolución es posible. Ignorar la realidad cotidiana que nos quiere imponer su aburrida, grisácea y rutinaria desilusión. Recordar la utopía que nos trajo acá y que solemos olvidar. Luego, respirar hondo, sacar fuerzas de los recuerdos y volver a construir el sueño derrumbado, el que no fue, el que nadie cree que sea posible.

Yo creo que podemos crear empresas tecnológicas en Chile de nivel mundial. También creo que podemos ganar dinero con ellas y generarle riqueza al país. Y también creo que la Universidad es el lugar donde se reunen todas las condiciones necesarias para crearlas: juventud, talento y conocimiento. Claro que venimos diciendo esto desde 1996, cuando creamos una incubadora de empresas en el proyecto AccessNova de la Universidad de Chile, en la Facultad de Ingeniería (incubacion.accessnova.cl). Es cierto que no ha resultado fácil: falta de capital de riesgo, falta de interés del mundo universitario por los negocios, falta de interés del mundo de los negocios por la innovación, etc. Los conocidos argumentos de la realidad para evitar que soñemos.

Pero, por otro lado, desde el 2001 hemos recibido más de 500 proyectos, hemos aceptado cerca de 50 y hemos generado más de 20 empresas que aun existen. El nivel de los proyectos ha ido mejorando aunque todavía no son lo que soñamos: solo tres proyectos de académicos han pasado por la incubadora y la gran mayoría de las empresas son con modelos bastante simples.

Sin embargo, al menos dos proyectos han resultado muy exitosos y nos llenan de orgullo: gemelo.com (sistema de almacenamiento masivo en Internet y nuestro primer incubado) y atentus.com (sistema de monitoreo de sitios web).

Hace 20 años, tuvimos un sueño: crear un laboratorio de investigación de nivel mundial en computación en Chile. Hace 17 años, tuvimos un sueño: administrar el dominio de país para Chile y ser una piedra angular del desarrollo de Internet en el país. Hace 10 años, soñamos con una ley de firma electrónica. Hace 5 años, soñamos con crear una factura electrónica.

Respiren hondo, eviten resignarse, e inténtenlo de nuevo: los sueños, a veces, se hacen realidad.





Jose M. Piquer 2004-04-16